Ahogarme en tu veneno
no fue tanto;
mas me hubiese gustado
beberlo todo
si tu piel negra era el cáliz
concentrado de las noches.
Yo ahondaba en besos
donde la luz no se atrevía a llegar.
Te confundía con el deseo oscuro,
y con la sombra lujuriosa que huye
del amanecer, cuando el orgasmo.
Tu boca abierta
se tragaba los abismos
mientras, al filo de tus labios rosas
se estrangulaban las lluvias
los ríos, el rocío y el mar...
La tempestad era un temblor
en la penumbra de los gemidos.
jueves, marzo 06, 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hasta aquí
Hemos llegado hasta este punto, arrastrados por el deseo mutuo que nos quemaba bajo la piel, en esto de leernos, hablarnos y escucharnos, y...
-
Usted y yo solemos vibrar con las mismas notas. Yo llego hasta sus labios hecho pedazos y usted me reincorpora y reconstruye de un solo bes...
-
Ya disponible en Amazon, para el mundo. ¡Búscalo! ´´Barco Roto, naufragio herido¨ (2017)
-
Estoy harto; cansado; fastidiado; y jodido. Cansado de las quejas; y de no hacer nada. Más hubiera preferido vivir en otro tiempo; otr...
No hay comentarios:
Publicar un comentario