Este verano promete lluvias
pero de esas que no mojan
de esas que traen ausencias
entreveradas entre las nubes.
Miro el cielo con gesto de sed
como esperando beber de él
la noche, el diluvio y el sueño
tendido sobre la hierba fresca.
Hoy tampoco lloverá, ya lo sé
solo me aguarda el desespero
el deshacerme bajo este cielo
insidioso por verme desierto.
El tiempo de las flores ya fue;
me queda afilar estas espinas
erguidas sobre la piel doliente
entre el recuerdo y las heridas.
sábado, febrero 15, 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
LA CARROÑA
Dios me libre de esos feligreses que vienen de ser carroña asquerosa, que liban a diario los jugos pútridos del verso malogrado ...
-
Arthur Fleck escribe en su bitácora de bromas, reflexiones y desatinos, el simulacro de un poema que, como nunca ni nadie, me...
-
Vos recogiste con ternura pedacitos de mí por todas partes y me volviste a armar nuevamente, hombre, barro y voz, en tu mirada; y me hici...
-
Mientras ese desahuciado intento de astro titilante brilla allá arriba, aquella triste y fascinante mariposa de la noche revolotea más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario