Yo quería ser una odalisca de siete senos
madre de hijo pródigo de un imperio.
¡Oh, noches de infierno!
Si tan solo existiera el cielo
y no este vil incendio en mi cabeza.
Yo puse a disposición de los vientos
todos los secretos de la antigua raza.
Ya poco y nada importaba eso. Las pirámides
han sido comulgadas a la fe cristiana
y ya no puedo llorar, me he secado por dentro.
Si tan solo mis antepasados
se hubieran reivindicado entre bandidos rurales
otra sería la fuerza en mi sangre innoble
y no esta herencia de pobres campesinos.
En fin, hay que continuar con la vida
alistarse para llegar temprano al trabajo.
Esto... esto no ha sido más que una fantasía.
jueves, mayo 22, 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hasta aquí
Hemos llegado hasta este punto, arrastrados por el deseo mutuo que nos quemaba bajo la piel, en esto de leernos, hablarnos y escucharnos, y...
-
Hay una belleza singular en lo feo como hay cierta ternura en la crueldad, reveses de un único gesto que pueden romper el alma de un tira...
-
Usted y yo solemos vibrar con las mismas notas. Yo llego hasta sus labios hecho pedazos y usted me reincorpora y reconstruye de un solo bes...
-
Vengo de pensar en tus labios; en el beso que precede a todos los besos, en el beso primero, en el beso fruto de los excesos, en el bes...
No hay comentarios:
Publicar un comentario