El cielo adentro
Tenía los ojos azules
y todo el cielo adentro.
Sólo la opocaba un defecto
no saber llover
cuando la tierra temblaba a sus pies.
y todo el cielo adentro.
Sólo la opocaba un defecto
no saber llover
cuando la tierra temblaba a sus pies.
Comentarios
Publicar un comentario