Noches todas aquellas,
donde tu cuerpo como una flor
aromaba con su presencia
la luz primera de nuestras ansias.
Amar yo quise, acaso, a amar llegué,
entre tus brazos una sonrisa
y entre tus piernas amar mejor amé.
Porque del sueño entre tus labios,
amar nos hizo el más bello delito.
Amar amé lejos del lecho, y en secreto,
entre las sábanas de un silencio.
Amar yo quise, acaso, a amar llegué.
Y del amor que en pecho nos rugía
y sexo adentro nos hacía crecer,
con un gesto de adiós no pronunciado
se nos fue alejando entre la noche.
jueves, abril 09, 2020
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