Hija de todas mis noches, eres el alba;
llegas cortando el desvelo sutil con luz
iluminando la totalidad de mis deseos,
cuando mi piel toda te nombra dueña.
Eres la cifra que susurra el resplandor,
cálida brisa que corre extasiada en mí
cuando las venas explotan en éxtasis
antes, durante y después del tiempo.
jueves, abril 10, 2014
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